Cuando llegué a Valencia apenas conocía la ciudad. Solo sabía de la existencia del Museo de las Artes y las Ciencias y de que tenía playa. Hace unos días fue el primer día que bajé al centro y ahí fue donde me encontré de sopetón con el Mercado Central, solo que en ese momento, no sabía ni que existía. Dí unas vueltas alrededor de él solo para observar durante un rato. Es un edificio precioso y me llamó la atención que siendo tan antiguo, se siguiera utilizando de manera cotidiana. Me di cuenta que su arquitectura no rompe la estética de la plaza, se integra a la perfección con otros dos monumentos importantes,La Lonja de la seda y la iglesia de los santos Juanes. 

Es un lugar enorme y no está mal conservado.Pero he de destacar que me encantó la cúpula de dentro, por donde la luz del sol entra dejando a la vista todos los colores y formas del techo

Fuente: Valencia Secreta

Fuente: Barcelo

Otro lugar que descubrí fue el mercado de Colón, y fue de casualidad, ya que al buscar en maps con el móvil que era lo que estaba viendo , di sin querer a este mercado. Al igual que con el mercado central, me impresionó mucho la cantidad de vida que se respira dentro, lleno de bares, gente y puestos todo ello disfrutando de la arquitectura que tiene casi 100 años y un estilo peculiar.

Fuente: Helen Berger

Fuente: Turismo Valencia